martes, 11 de noviembre de 2008

...Pero yo te quiero igual



Aunque tú me has echado en el abandono,

aunque tú mataste mis ilusiones,

en vez de maldecirte con justo encono,

en mis sueños te colmo de bendiciones...

____________Lágrimas negras...


Pues justamente con el amor, o desamor según se mire, quería retomar este blog o proyecto de él. No traigo nuevas ni aportes novedosos del mundo que nos rodea, sólo una reflexión que últimamente me viene rondando la cabeza. Como es natural en mí, suelo reflexionar con música. Y últimamente me ha dado por la música del desamor, por esa música desgarradora que echa esas lágrimas negras que guardamos en nuestro interior y que tanto nos cuesta sacar a veces. El caso es que de todas las canciones de desamor, yo me quedo con un tipo concreto: aquellas que no guardan rencor del todo, aquellas en las que el autor dice claramente: "me has jodido la vida pero te sigo y te seguiré queriendo igual". Me han impresionado positivamente porque creo que es uno de los mayores tributos al verdadero amor. Creo que es lo más difícil de hacer y es algo que sólo está al alcance de las personas más fuertes: no guardar rencor aunque te hayan destrozado por dentro y tener el valor suficiente como para reconocer que el amor que sentías por esa persona no era falso y que, por tanto, perdura y perdurará en el tiempo. Ya lo dice la archiconocida canción "Te quiero igual": "Te quiero pero te llevaste la flor y me dejaste el florero, pero yo te quiero igual"....Claro que, a ver quién es capaz de decirlo sin tirarle el florero a la cabeza...



Cuestión de percepción. Cuestión de sentimiento. Cuestión de agallas.


En un viejo café...